La Condesa SangrientaCuando un niño está por nacer, los padres elaboran largas listas de nombres, discuten el significado, la originalidad o la simpleza, su consonancia con el apellido, la indeseada posibilidad de diminutivos o rimas vergonzantes y la asociación, no siempre afortunada, a determinados personajes.
Al nombrar, sellamos. Marcamos una impronta ligada al destino del nominado. Rubricamos lo que definirá al otro. Encarnamos en la palabra lo que todavía no es y lo que ha de ser.
En el mundo virtual, podemos elegir y rebautizarnos. Muchos nicks se explican por sí mismos, otros son inexplicables. Algunos suenan amenazantes, otros sugieren eróticas promesas. Los hay ingeniosos, crípticos, románticos, botánicos y zoológicos. Personajes de la música, la literatura y la mitología, de la historia o de historieta. Hay quienes hacen de su nombre, su nick.
Las variantes son incontables e intrigantes.
Signar también es potestad del vencedor. Me pregunto entonces, si de verdad conquistamos un nuevo territorio o tan sólo resignificamos el viejo al nombrarlo por segunda vez.
Por estos días varias personas han preguntado mi verdadero nombre y no he querido revelarlo porque no sumaría nada a la que he dado en conocer y tampoco me reconocerían en él.
Alguien me está pensando un nombre, lo elige cuidadosamente para designar al fantasma de su fantasía y será perfecto como cada uno de los nombres a los que respondo y correspondo.
Somos complejos y multifacéticos, somos Uno habitado por muchos. Los reconozco a todos, les presto voz y dejo hablar a cada cual con su propio nombre.
Que es el mío.
Cuando escribo mi nombre,/ lo siento cada día más extraño./ ¿Quién será ése?/ Y no sé qué pensar.
De otro modo. Ángel González.
Yo he acumulado mi esperanza/ en la lengua, en nombre hablado, en nombre escrito;/ a todo yo le había puesto nombre/ y tú has tomado el puesto/ de toda esa nombradía.
El nombre conseguido de los nombres. Juan Ramón Jiménez.
Al nombrar, sellamos. Marcamos una impronta ligada al destino del nominado. Rubricamos lo que definirá al otro. Encarnamos en la palabra lo que todavía no es y lo que ha de ser.
En el mundo virtual, podemos elegir y rebautizarnos. Muchos nicks se explican por sí mismos, otros son inexplicables. Algunos suenan amenazantes, otros sugieren eróticas promesas. Los hay ingeniosos, crípticos, románticos, botánicos y zoológicos. Personajes de la música, la literatura y la mitología, de la historia o de historieta. Hay quienes hacen de su nombre, su nick.
Las variantes son incontables e intrigantes.
Signar también es potestad del vencedor. Me pregunto entonces, si de verdad conquistamos un nuevo territorio o tan sólo resignificamos el viejo al nombrarlo por segunda vez.
Por estos días varias personas han preguntado mi verdadero nombre y no he querido revelarlo porque no sumaría nada a la que he dado en conocer y tampoco me reconocerían en él.
Alguien me está pensando un nombre, lo elige cuidadosamente para designar al fantasma de su fantasía y será perfecto como cada uno de los nombres a los que respondo y correspondo.
Somos complejos y multifacéticos, somos Uno habitado por muchos. Los reconozco a todos, les presto voz y dejo hablar a cada cual con su propio nombre.
Que es el mío.
Cuando escribo mi nombre,/ lo siento cada día más extraño./ ¿Quién será ése?/ Y no sé qué pensar.
De otro modo. Ángel González.
Yo he acumulado mi esperanza/ en la lengua, en nombre hablado, en nombre escrito;/ a todo yo le había puesto nombre/ y tú has tomado el puesto/ de toda esa nombradía.
El nombre conseguido de los nombres. Juan Ramón Jiménez.
34 comentarios:
Siempre hay coincidencias. O tal vez sea que las ideas son una especie muy potente de energía, esa que mencionaba el gurú hippie que filmó su muerte. Una corriente intangible que algunos percibimos y como interfases reflejamos en códigos o palabras a otro nivel. Hace apenas un rato puse un comentario en otro lado en que me refería a esto de los nick. Los miré como caretas, artilugios que en este caso permiten que aflore la verdadera diversidad.
Tal vez por que durante los años del horror debí usar seudónimos, o porque hoy, en muchos casos me veo obligado a ser "le negre"-ese que escribe lo que otros firman- yo por el contrario, me la paso tratando de recuperar identidad al derecho y al revés.
fraterno
js
Estimados: yo sé como se llama! el verdadero nombre de la Condesa Sangrien t a ... e s ... ooh!
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- (oficial) está todo en su lugar?
- (agente) correcto señor, el móvil del crimen no ha sido un robo.
- (oficial) le tomaron las huellas?
- (agente) si señor, corresponden a un tal Luigi.
- causa de muerte?
- Lo ignoramos señor, pero tiene dos marcas muy llamativas en el cuello.
- Por Tutatis! páseme el registro de vampiros y afines; quiero un informe de los ultimos movimientos de esta gente.
- de acuerdo señor
- Y hagame un favor: descuelgue ese poster de Ferrari... apesta!
Todo espíritu delicado elige su máscara de la misma manera que le gustaría elegir su nombre. Como se ha dicho, "hay en toda mentira una inocencia que la hace una buena acción". Después de todo, quiénes somos en realidad, a quién le importa y qué importancia tiene, siguen siendo un misterio.
Si hay una enfermedad muy difundida, y grave en la red, es la de no entender el tema de la identidad.
La gravedad a mi modo de ver se expresa en que, aún personas inteligentes, en algún momento broten con el tema del nombre.
El Caballero de la Luna es el Caballero, Luigi es Luigi, José Soriano (que rompe este brillante razonamiento) es José Soriano, pero en otro momento no lo fue, yo soy yo; y gracias al dios de la red, la Condesa es la Condesa.
Que quieren saber de una persona que en este ámbito se expresa tan bien?. Que les importa si se llama María, Josefa, Ambar, Sienna, Marjorie, Svetlana....
Acá todos somos ese nombre que elegimos, y con el interactuamos. muchas veces expresándonos de manera que en nuestros campos de batalla naturales nos es imposible (por lo que sea, en variantes tan extremas como el gusto, o la pusilanimidad).
Una orden para los nombrados arriba (José, obvio, llegué tarde), y los que lean. Sigan usando su nick, con el sean honestos o deshonestos; buenos o malos, simples o rebuscados, divertidos u oscuros.
Y usted Count, siga siendo la Condesa, y jamás Martita Gónzalez
Bueno caballero, las cosas no "son" ni importantes ni azules.
En cuanto a Ud., Condesa, me gustó mucho el post. Yo no sé cómo haría si tuviera un niño "al nacer". Tal vez le haría elegir su nombre a los 17 años.
En cuanto a la palabra que es inevitablemente un nombre, no sé si le conferiría tanta importancia como para decir que esta encarna (o deba encarnar) el devenir del sujeto.
Sea como sea, el nombre por el cual se haga llamar puede ser V (verdadero) o F (falso).
El nombre falso que le estoy buscando no solo la designará tanto como puede designarla (idealmente) "RA233/B", sino que gozará (idealmente) de eufonía. Claro, no le añadirá carisma ni buen gusto a su persona, pero por lo menos me acostumbraré más a "Hola, &#$%" que a "Hola, Condesa", que ahora que lo pienso me suena a...
Y por favor, dígame que mi nick sugiera eróticas promesas.
Permiso, Condesa, me gustaría contestarle a Mickey.
Yo debo estar enferma, realmente no entiendo cual es el tema de la identidad!
Solo se que en la red, cada uno es el que quiere ser, o el que puede ser.
Uno se pone nicks, o usa el nombre propio, da lo mismo. Cada uno es como es, o como puede ser, o como elige ser.
Preguntarle el nombre a una persona no me parece nada malo, y menos aun enfermo.
Si me parecería malo no respetar la decision de esa persona de no revelarlo.
Saluditos para todos!
Cuando pregunté (tenía unos 10 años) qué era un nick, me dijeron que era algo distinto a tu nombre. Lo acepté sin problemas, y me puse algo así como... Pato. Jajaja.
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-Inodoro, ¿usted se llama Inodoro, o le dicen Inodoro?
-Me dicen Inodoro.
-Ahh
-...porque me llamo Inodoro. Y si me llamo Inodoro no me van a decir Florencia.
¿Cómo no es Gabriella Erzsébet Báthory-Nádasdy de Ecsed? Ja.
¡Que costumbre esa de querer conocer los nombres! Todavía recuerdo los tiempos de la corte, en los que la conocí a usted y al resto de la realeza. Tiempos en que uno no era un nombre, ni siquiera un nick, sino lo que se escribía y nos juntábamos por afinidades ¿y el resto? Qué siguiera participando.
Sigo sin entender, junto con stella, qué hay de malo en querer saber el nombre de alguien. E irónico agrego, ¿seré demasiado apolíneo?.
Sea como sea, para mí una persona es mucho más que un nombre, mucho más que un nick, y sí, también mucho más que "lo que escribe". Persona es una persona es una persona es una persona: carne, electricidad que la atraviesa, el shampoo que usa y también el nombre que tiene, el que le gustaría tener y por el que se hace llamar. Y el que le dan los amigos.
Uhhh, esto va a ser largo.
José: las ideas tienen tanta potencia y energía que en las épocas del horror se las persiguió y hubo que usar seudónimos por ello. Los monstruos también usaban seudónimos que sólo encubrían...otros monstruos.
Luigi: la delación se paga con sangre!
Caballero: la máscara cubre y protege, pero los ojos no se ocultan y dicen verdad para el que sabe ver.
Mickey: eso quise decir. Para mí uds. son José, Mickey, Luigi, Caballero, Enter, Stella y Lex; a pesar de que conozco el nombre de varios no los identifico con ellos. Seguiré siendo la Condesa, nunca Martita Gonzalez...es que Chiche Sosa no es mi tipo!
Enter: Según dicen, el nombre elegido es importante en su connotación y en su sonoridad.
Su nick sugiere promesas eróticas, especialmente la 1ra.mitad, je.
Stella: ya le contesté vía mail.
Lex: Aquellos eran otros tiempos, algo así como los albores de la www, otra mística y otros tantos que ya no participan.
Por último: no hay nada de malo en querer saber el nombre de alguien, denota interés, amabilidad y ganas de acortar distancias. Sucede que a mí me despierta mucha más curiosidad averiguar el porqué de cada nick. Cuál es el motivo por el que se ha elegido tal o cual seudónimo. Venimos con el nombre puesto pero...¿por qué elegimos ser otros? ¿por qué nos identificamos con determinado personaje? Eso era nada más.
Está muy bien.
De hecho, me pregunto qué Juan es ese que firma con mi nombre.
Gracias, Condesa, me alegró el día. :D
La historia de mi nick es bastante aburrida. Ahora, cómo nacieron los nicks, eso puede ser más interesante, aunque no se si entraña algo más trascendente que una moda.
En cuanto a su nombre, tengo en mi poder una lista con nueve candidatos, todos horrendos.
La idea de que la Condesa tenga un nombre distinto al que tiene es absurda , ademàs de horrible. De que otra forma podrìa llamarse?
Sin usar adjetivos que ofendan a Stella, quiero explicar que a mi tambien me parece que en este sitio nos hemos dado nombres, y cualquier otra palabra no nos nombra. Nos identifica el nick, todo lo demàs nos es ajeno.
Bueno, realmente no quiero ofenderte, adivinador, y perdoname si soy demasiado crudo.
Pero la idea de que lo unico que nos identifique sea el nick, y que sea horrible que la condesa tenga otro nombre, me parece algo sumamente cursi. Me recuerda a una mezcla entre Pessoa, algun romantico "linea dura" y El Principito.
Stella, creo que decís casi lo mismo que yo.
Mi énfasis lo puse en que algunos bloggers, en algunos momentos de furia, saltan con eso de que se abusa del anonimato.
Condesa, nunca dudé de usted!.´
Otra cosa, fue casualidad lo de Marta González. De todas maneras, una lástima lo de Chiche, porque hoy por hoy, es hombre libre de compromisos.
Juan González del Solar no es un nick????. Que desilución!!!!!!!.
Mickey, todo bien, ya me lo explicó Condesa!! :)
Adivinador, entiendo a lo que se refiere y no me ofende en absoluto.
Son elecciones de cada uno. Será que de tantos años de chat ya me cansé de no ser llamada por mi nombre, y por eso decidí usarlo en los blogs.
Creo que el tema es mucho mas profundo que un nick y un nombre. Yo no lo puedo evitar, me involucro con la gente, sean nicks o nombres. Me alegro cuando le pasan cosas buenas, y me entristezco si los leo decaídos.
Sebas puso hace dos dias en su blog, que estaba feliz porque se había curado de un cancer que lo aquejaba. No se si Sebas es su nombre verdadero o un nick, y en verdad poco importa! Yo no pude evitar alegrarme con el, y me faltaron palabras para expresar mi alegría.
Entonces creo que lo demás si importa, al menos para mi.
Pero insisto, es una apreciacion mía personal, y eso no quiere decir que sea la verdadera . Cada uno elige la manera de "vivir" esta red que nos une. Y todas las maneras son absolutamente correctas, pues son individuales.
Besito para todos!
yo soy bonito lunch , pero mi verdadero nombre es ramiro blacutt . esta bien?
Hola Condesa!, sinceramente el contenido es lo que define la botella. Hay nombres que nos condicionan. No es lo mismo llamarse Roberto que Luis... digamos que el primero colabora a una existencia más sólida.
En fin, me gusta mi nombre y este es.
Un beso condesa, cuidese mucho.
Ojalá se llame Mina!, sino, la queremos igual eh!
Juan: según recuerdo, aquél Juan González no es el mismo que éste Juan González del Solar. Y debe haber muchos otros más, seguro.
Enter: estoy esperando mi nuevo nombre. Los 9 se habían reducido a 2, vamos bien.
Adivinador: eso...¿de qué otra forma podría llamarme? ya vé cómo se le está complicando a Enterhase!
Mickey: ¿usté se quiere traer a Chiche para dirigir el Ciclón? ¿o habla de otro tipo de compromisos?
Stella: con tantos años de chat, sabrás que la gente viene, va y muchos no responden a nuestro cariño o lo interpretan mal. Será por eso que ahora dosifico. Pero tengo casos cercanos que han terminado en felices casamientos o amigos de fierro como el Lex que uds. conocen.
Bonito: tiene un nombre precioso pero yo lo reconozco como Bonito Lunch, Lunchero (como lo llama Roedor) o simplemente Bonito, también está bien y la cosa no cambia.
Fer: No me llamo Mina, aunque lo soy, y buena, eh? ;0)
Condesa: tiene nombre.
Y hace muy bien, Condesa! Hay mucho loco suelto! ajjaja
Besito, y tengan un lindo día todos!
Condesa, espero que ahora no crean que soy Osvaldo Laport, por lo “de fierro” digo.
Ayer estaba pensando que, virtualmente, somos más viejos que el blog y ahora, que me pongo a hilar más fino, nos conocemos desde antes que existiera Google!!!
Lo del no-nombre es, entre otras cosas, una consecuencia de los años de net. Si tenía que salir, salía, por algo natural y con el tiempo. Cuando uno se hacía de su grupo de interés por lo general dejaba de lado aquel que empezaba con los clásicos ¿cómo te llamas? ¿De dónde sos? ¿Cuántos años tenes? ¿Venís seguido a esta sala de chat? Hay gente que hace más de diez años que conozco, incluso en persona, de que aún no se su nombre, somos nuestros nicks.
Cuando mencione que en muchos casos “éramos lo que escribíamos”, hacía referencia a que ni era necesario el nick, ya que al leer lo que decían, sabíamos de quien se trataba.
Mirá vos el bonito desbole que genera un nombre / nick.
El mío no es Glenda, pero yo soy yo.
Si vos lo decís...
Y a mi me quedó El Pasquín porque soy nuevo en esto de los blogs y no supe separar el nombre del blog con el mío, así que nos fucionamos y salió así. Igual me pueden llamar como les parezca, en lo posible que no sean insultos porque soy un tipo muy sensible...
Saludos Condesa, y a todos los demás también.
Uff, me canse! y perdí....
quien cuernos somos
Cuando incursioné en el mundo blogger estaba leyendo a Sor Juana Respuesta a Sor Filotea de la Cruz (Ed.Hispanicas) una carta autobiografica donde narra su vida, defiende sus ansias de conocimientos, un libro apasionante de como esa monja lucha , soporta criticas, calumnias y estudia, y aprende y escribe poemas amorosos y es sancionada y cultiva su paciencia y tolera y sufre y me apasioné con su vida. Era una mujer al filo que vivía intensamente que se desahogaba escribiendo y meditando y soportando con estoicismo a sus verdugos.
Cuando me tuve que poner el nick no lo pensé, fui filotea, filomena, filo, , esa es mi pequeña historia de cómo elegi mi seudonimo, homenaje a esa mujer valiente y talentosa.
Nada de doble filo, ni de filosa... solo un pequeño gesto hacia la poetisa de Neplanta. Gracias countess por las confituras !!!!
Lex: si como dice, la web puede dividirse en AG/DG ¡nosotros somos prehistóricos!
Glenda: sé su nombre pero para mí seguirá siendo Glenda.
Pasquín: ¿es también Delfín? como es nuevo estamos a tiempo de nombrarlo según quiera.
Guarro: ud. es un guarro muy querido que a veces se comporta como un Perro...¿me equivoco?
Enter: me encanta el nombre que eligió para mí pero su significación excede mis méritos. Gracias!
Carta de La Condesa en respuesta a Sor FiloBloggera:
Querida Filo:
no creo que su nombre hubiese causado en mí tanta (buena) impresión como su nick.
Siempre creí que venía por el lado de la filo-sofía. No sé si habrá leído un viejo post que escribí allá por marzo, sobre Sor Juana y que expresa mi enorme admiración por ella y sus talentos, que ud. ha expresado tan bien.
Una mujer moderna que enfrentó a los poderes de turno, que quiso ser utilizada por un obispo y respondió, después de la carta, con un silencio autoimpuesto. Dueña absoluta del saber, del saber decir y del saber no decir.
Filo, Filo, Filo... su nick decididamente termina de cerrar el abrazo que siempre le tendí.
Un beso enorme.
Maso conde, je
Los de los nicks es algo tan raro, estoy en internet casi desde sus inicios y tuve muchos nicks, pero también he usado muchas veces mi nombre verdadero. Todavía no me acostumbro a que me llamen "Koba", es una sensación extraña, como la de llamar "Estrella" a una persona que sé como se llama.
Me produjo una gran emoción!!! gracias countess!
"Si hay una enfermedad muy difundida, y grave en la red, es la de no entender el tema de la identidad", esto dice Mickey, y estoy de acuerdo con él. Mucha gente se enoja, como si ponerse un nick fuera un acto de cobardía y no parte de un juego, o de las reglas de ese juego.
Como Koba, a veces uso otro nick, a veces mi nombre verdadero, aunque ahora estoy de lo más instalada y cómoda con "Estrella".
Será quizás porque nunca me gustó mi nombre.
Buen post Condesa, muy bueno.
Su nombre es Estrella...
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