21 de mayo de 2007

Historia mínima

Ellos vivían en un dedal.
Abrigados, abigarrados y con la ominosa intuición de que en cualquier momento les metían un dedo.

3 comentarios:

El Caballero de la luna dijo...

¿Será ese un miedo digital?

La condesa sangrienta dijo...

¿se curará con digitopuntura?

Anónimo dijo...

Excelente texto. Por si no conces este sitio, me tomo el atrvimiento de recomendártelo www.ficticia.com
Ahí hay una sección (marina) en la que mucha gente escribe historias mínimas, minificciones, es muy interesante.

saludos