19 de abril de 2007

Cadáver(es) exquisito(s)

El “chinito” que se cargó a 32 en Virginia, resultó ser un coreanito. Pero, bue…se’igual. Todos los “negritos” están en la misma bolsa y no es fácil distinguirlos (podría corroborarlo Jean de Menezes, aquel de Londres. Si pudiera) .
Estamos preocupados… ¿qué hacer? Mejor prohibamos a chinitos, negritos y chicanitos el ingreso a las universidades ¡tenemos un noble motivo! ¡fuck off, God save America! Freedom.
Ah...pero el discurso de no prohibir ¿dónde queda? mmmmm mejor aumentémosles la matrícula y neguemos visas. Ahora sí. Ahora no discutamos la libertad de comprar y portar armas. O la discutimos más adelante. O que cada estado la discuta de acuerdo a las masacres que supo conseguir. O al número de negritos que figura en el último censo. O al voto de las minorías. Somos custodios de los derechos individuales. Portavoces de la libertad.
Carlitos Heston llevaba un rifle debajo del Manto Sagrado ¿habría que prohibirle el manto o el rifle? No, no. La gente hubiese seguido amando y matando igual. Prohibido prohibir. Además, en cualquier momento se muere y sus dedos estarán fríos y secos de verdad. ¿lo enterraremos con el rifle o con el manto? Con los dos, mejor.
La gente muere en genocidios, en masacres, en accidentes, en guerras; muere de hambre, de frío, de cáncer, de SIDA.
La gente muere.
Indefectiblemente, ineludiblemente.
Esto sucederá, prohíbase lo que se prohíba, de acuerdo, pero no se puede banalizar ni minimizar la cuestión. Correr el eje homologando a Kirchner con el coreano o establecer paralelismo entre estas muertes y otras muertes, resulta falsamente provocador, estúpidamente demagógico y expresamente tonto.
(Por si no se entienden estos pensamientos descolgados, aclaro que este post fue, en realidad, un comment abortado)
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Yo denuncio a toda la gente/ que ignora la otra mitad,/ la mitad irredimible/que levanta sus montes de cemento/ donde laten los corazones/ de los animalitos que se olvidan/ y donde caeremos todos [...]
New York (Poeta en Nueva York) Federico García Lorca

12 comentarios:

Anónimo dijo...

Coincido con Ud., leí en otro blog el post que seguramente generó su comentario abortado, y la verdad lo tomé como de quien viene, un ser simplemente abyecto falto de ideas.

El Caballero de la luna dijo...

¿Comment a artículo de La tuya está?
Te recomiendo las reflexiones de Octavio Paz sobre el sentido de la muerte en Aztecas, españoles y mundo contemporáneo. Lo traicionaría si lo resumiera o parafraseara.
Cuando se nos desbocan las certezas, mejor buscar un texto lúcido que las ordene, ¿no?

Roedor dijo...

No vi nada en el blog de SJ sobre el tema. ¿Dónde es que la tarde está aburrida y calurosa y tengo ganas de pelearme con alguien?

Gracias.

La condesa sangrienta dijo...

A ése artículo me refería Glenda. Algunos "próceres" de peluche se creen con derecho a decir cualquier boludez y recibir aplausos.
Caballero: He leído bastantes autores mexicanos (Rulfo, Fuentes,Sor Juana, Azuela, etc) también a Octavio Paz, ensayos y poesía,a quien admiro;dígame dónde buscar lo que ud. cita.
Roedor: comenté en el otro blog con uno de mis alias, justamente debajo suyo y arriba de aguilucho.
No lo hice como la condesa porque piensan que ella tiene algo personal con M.B y no es así. Sólo lo conozco por sus dichos.
la tarde está bochornosa y húmeda acá también, pero no tengo ganas de pelear.

El Caballero de la luna dijo...

Condesa: lo que le recomiendo está en "México en la obra de Octavio Paz" vol.1, del Fondo de Cultura Económica. Para mí es una bitácora indispensable para conocer a los mexicanos, al tiempo que me revela cosas de la Humanidad.
Perdone por la descortesía de no invitarla a mi blog. Allí ya hubiera descubierto que no soy mexicano, sino compatriota suyo.

La condesa sangrienta dijo...

Ya tomé nota, gracias!
Pasé por su blog y corroboré su argentinidad que, al igual que la mía, no desdice de la mexicana.

Anónimo dijo...

¡Cómo me calienta Montes Bradley!

La condesa sangrienta dijo...

jaaaaaaaaaaaaaaaa parece que la condesa trucha ha llegado a mi condado. Está muy bien querida pase y disfrute!
(¿piensa violar mi password otra vez? Usté sí que se las sabe todas eh?)

Luigi dijo...

Uy, ahora sí que no entiendo un carajo... Cuantas Condesas hay???

La condesa sangrienta dijo...

Condesas hay muchas, ud. deberá distinguir quién es quién y con quién se queda, Luigi.

Lex, el Eterno Culpable dijo...

Déjela que sangre por la herida, condesa. Ya sabe, es el precio que hay que pagar por ser popular

La condesa sangrienta dijo...

sí... el precio más bajo! je