Ombres et lumières, óleo, 50x65, W.R
La muerte arrebata una
presencia y nos deja desnudos, solos en la tarea de desaprender gestos comunes
y ritos compartidos.
Mi padre ha muerto ayer,
lejos, y la evidencia de su muerte se hará piedra en el silencio del teléfono;
epitafio mudo, certeza inapelable de que, definitivamente, he dejado de ser
hija.
..º..